* Desde que se cerrara el templo hace cinco años por peligro de derrumbe se han gastado más de 30.000 euros
Las plegarias de los vecinos de Vall de Almonacid han obtenido respuesta después de cinco años de echar temerosas miradas al cielo, contra el que se recorta la imagen de la agrietada iglesia parroquial de la Purísima Concepción, que en 2004 tuvo que ser cerrada al culto por peligro de derrumbe. La respuesta a los rezos viene de la mano del convenio firmado por el Ayuntamiento con la Conselleria de Cultura y la Diputación Provincial de Castellón, mediante el cual se aprueba la contratación de estudios para determinar las causas del deterioro del templo y la redacción del proyecto de intervención. Mientras, los vecinos suman cinco años sin iglesia.
El estudio completará los múltiples análisis realizados hasta ahora, dado que «con los datos que tenemos no encontramos a ningún arquitecto que se atreva a redactar el proyecto», manifestó el alcalde de Vall, Antonio Cases.
La doble licitación del estudio y proyecto, que sale a concurso por 81.200 euros, fija un plazo de ejecución de cinco meses, por lo que antes de acabar el año se conocerá «la obra que se tiene que hacer y el dinero que hará falta». «Con el proyecto en la mano ya pincharemos a Conselleria, Diputación o a quien haga falta para que las obras se hagan y no se demoren tanto como hasta ahora», afirmó Cases. La inversión se suma a los 13.000 euros pagados a la empresa Enrique Artola por realizar catas, 6.000 a la firma Copaypa por la ejecución de un estudio geotécnico y 11.700 a la empresa Aidico y a la Universidad Politécnica de Valencia por monitorizar las grietas del templo. Al parecer, la existencia de una gran masa de agua bajo la iglesia podría ser la causa de su grave deterioro.
Fuente: Las Provincias de Castellón
Las plegarias de los vecinos de Vall de Almonacid han obtenido respuesta después de cinco años de echar temerosas miradas al cielo, contra el que se recorta la imagen de la agrietada iglesia parroquial de la Purísima Concepción, que en 2004 tuvo que ser cerrada al culto por peligro de derrumbe. La respuesta a los rezos viene de la mano del convenio firmado por el Ayuntamiento con la Conselleria de Cultura y la Diputación Provincial de Castellón, mediante el cual se aprueba la contratación de estudios para determinar las causas del deterioro del templo y la redacción del proyecto de intervención. Mientras, los vecinos suman cinco años sin iglesia.
El estudio completará los múltiples análisis realizados hasta ahora, dado que «con los datos que tenemos no encontramos a ningún arquitecto que se atreva a redactar el proyecto», manifestó el alcalde de Vall, Antonio Cases.
La doble licitación del estudio y proyecto, que sale a concurso por 81.200 euros, fija un plazo de ejecución de cinco meses, por lo que antes de acabar el año se conocerá «la obra que se tiene que hacer y el dinero que hará falta». «Con el proyecto en la mano ya pincharemos a Conselleria, Diputación o a quien haga falta para que las obras se hagan y no se demoren tanto como hasta ahora», afirmó Cases. La inversión se suma a los 13.000 euros pagados a la empresa Enrique Artola por realizar catas, 6.000 a la firma Copaypa por la ejecución de un estudio geotécnico y 11.700 a la empresa Aidico y a la Universidad Politécnica de Valencia por monitorizar las grietas del templo. Al parecer, la existencia de una gran masa de agua bajo la iglesia podría ser la causa de su grave deterioro.
Fuente: Las Provincias de Castellón
